Economía
En 2018, la cantidad de empresas registradas en Santa Bárbara fue de 218.7 El Índice de Complejidad Económica (ECI) en el mismo año fue de -0,32, mientras que las actividades económicas con mayor índice de Ventaja Comparativa Revelada (RCA) fueron Actividades de Mantenimiento del Orden Público y de Seguridad (1297,81), Cultivo Forrajeros en Praderas Mejoradas o Sembradas (312,9) y Cultivo de Otros Cereales (172,85).
Gracias a sus orígenes prehispánicos hoy día podemos señalar que Santa Bárbara siempre estuvo ligada al ámbito productivo; recordemos que los pueblos originarios prehispánicos ya desarrollaban cultivos en la cuenca del Butalevo, actual río Biobío, de maíz, tomate, ají, quinoa, orégano, entre otros. También la ganadería se desarrolló en gran magnitud con animales salvajes tales como el guanaco, el huemul, el ñandú, y pudú, que era la dieta de sus ancestros. Pero el desarrollo agrícola tal como lo conocemos hoy como industria se inicia con la llegada de los españoles, luego de la fundación del fuerte de Santa Bárbara donde años antes los jesuitas habían hecho su trabajo entregando técnicas de agricultura a los pehuenches. Los primeros cultivos que se entregaron a estos territorios fueron las vid. Las viñas que estaban sitiadas en el norte alto en específico lo que hoy es el sector de San Antonio, Rinconada, Mañil Alto y El Sótano, donde se desarrollaron grandes viñas de cepa país, blanco Italia de Alejandría, y otras vides que están en investigación. Esto trajo consigo una gran producción de vinos de alta calidad, recuerdo de las misiones jesuitas establecidas en ese lugar, dando paso también a la agricultura en los diferentes sectores (hoy uno de los sectores que mantiene su acción agrícola es Corcovado) mantienen el desarrollo agrícola ganadero, con crianza de ovinos, bovinos, equinos; así también queda de manifiesto los relatos del año 1890 cuando establece la gran cantidad de fundos que tenía Santa Bárbara, más de 45 fundos de los cuales se puede detallar algunos. También se puede señalar la afloración de alfarería en el sector denominado hoy en día Las Obras, donde se generaba gran producción de artículos en greda que favorecía la venta de tejas, ladrillos y utensilios domésticos. El desarrollo forestal fue uno de los puntos más importantes del desarrollo de Santa Bárbara dado que se extendía hasta la alta cordillera, y por la escasez de caminos se realizaba la extracción de madera en la cuenca del Biobío; lo que hoy se conoce como la Villa Ralco, nace producto de la explotación maderera de la alta cordillera; se encastillaba la madera y se bajaba por el cauce del río Biobío en balsas, que se demoraban meses en llegar a Concepción, para posteriormente embarcarlas hacia Europa y el norte del país. Esto dio inicio a la actividad silvoagropecuaria en la comuna, fue así que en el año 1891 Santa Bárbara es decretada comuna y también ciudad por el gran desarrollo económico que traía consigo y se empezaron a desarrollar grandes obras de infraestructura como los puentes; los puentes más emblemáticos que se mantienen hasta el día de hoy, el puente colgante construido el año 1891 y el puente Piulo construido en 1937. Esto impulsó la actividad económica agrícola, donde la ciudad de Santa Bárbara se reflejaba y se mantienen hasta el día de hoy parte de las 7 bodegas trigueras, que era donde se almacenaban los granos que se cosechaba en los campos, y se almacenaba para posteriormente trasladar mediante el ferrocarril hasta diferentes puntos del país, dado que Santa Bárbara era considerada que estaba dentro del granero de Chile.
Tras el desarrollo silvoagropecuario de gran intensidad, aflora la apicultura como un icono de productividad menor, pero que fue tomando fuerza con el tiempo, logrando hoy día posicionarse como una de las actividades económicas más rentables y más representativas de la comuna de Santa Bárbara. No obstante, también la industria forestal ingresa fuertemente tras la reforma agraria donde se desarrolla la parcelación de los fundos, y trajo consigo que los nuevos propietarios vendieran sus predios a las empresas forestales, transformando hoy día la comuna de Santa Bárbara con más del 50% de su territorio en suelo de uso forestal. Desde esta mirada es que se focaliza a través de los recursos naturales y parte el desarrollo turístico en la década del 60 con gran fuerza en la cuenca del río Biobío, con el turismo aventura, específicamente el rafting que se genera a punta de lanzas para el desarrollo de Chile y Latinoamérica. Esto lamentablemente se vio afectado por la actividad hidroeléctrica que atenta contra el río Biobío y genera una merma dentro de su desarrollo productivo, generando una gran cantidad de energía, dentro de la cantidad de megawatts (452,4 Mw) que en la actualidad Santa Bárbara entrega al sistema interconectado central.
La comuna de Santa Bárbara tras la actualización del PLADECO año 2019 establece 3 ejes de desarrollo entre los cuales podemos destacar: el turismo, la apicultura y la agricultura. Esta es la visión de desarrollo económico local que tiene hoy en día, donde Santa Bárbara se presenta como una comuna que cuenta con un gran potencial de desarrollo económico, dados sus recursos naturales, y que cuenta con sectores emblemáticos del desarrollo agrícola, como son Los Boldos, Los Naranjos, Corcovado, Los Junquillos, Mañil Bajo, El Parrón, por mencionar algunos. Debido al cambio climático, hoy día Santa Bárbara se presenta como una de las comunas con mayor porcentaje al desarrollo frutícola, y es así como se están desarrollando grandes huertos, y se espera que el año 2030 va a liderar en el rubro frutícola de la provincia del Biobío, gracias a las condiciones organolépticas que genera la cuenca del río histórico del país, el Biobío.
Miel
Santa Bárbara “Capital Nacional de la Miel” cuenta con una oficina municipal dedicada exclusivamente a la miel, creando la Oficina Municipal de la Miel el 26 de agosto de 2016, con el objetivo de desarrollar una Apicultura Sostenible caracterizada por un manejo natural que permita la obtención de productos de la colmena con el Sello Apícola Local caracterizado por la protección de la abeja, su hábitat natural y los ecosistemas necesarios para su accionar como principal polinizador natural que asegura la biodiversidad del planeta y a nivel local la obtención de productos que permitan la elaboración y generación de subproductos y servicios de la colmena, que según reconocidos y variados informes técnicos poseen características y propiedades únicas que pueden aportar a la salud y bienestar de las personas.

Apicultura Sostenible
En colaboración con apicultores , empresarios y artesanos locales, pone a disposición de la comunidad y visitantes, conocimientos del mundo de la apicultura natural y sostenible, como una actividad productivo económica con un enfoque que integra la ecología y la economía cuyos procesos no tienen impactos ambientales negativos, permitiendo preservar el medio ambiente, los recursos naturales y ecosistemas, generando oportunidades de desarrollo, bienestar y salud para las actuales generaciones y el resguardo del patrimonio natural para las generaciones futuras.
La Oficina Municipal de la Miel está ubicada en Rosas N° 50 (costado poniente de Plaza de Armas y atiende público en horario de (10:30 – 14:00 / 14:45 – 16:30) tiene a disposición del público información de los productos, subproductos y servicios con sello, información sobre el Sello Apícola Local, sobre nuevas formas de consumo y de uso de los productos y subproductos de la colmena y donde poder adquirirlos.
Todas las mieles ofrecidas en degustación y con contacto de comercialización tienen el respaldo de sistemas productivos y extractivos certificados.
Turismo
Gracias a su geografía siempre ha llamado la atención ya que genera impacto dentro del aspecto económico y los primeros registros que existen respecto al afloramiento del turismo en Santa Bárbara data desde el año 1769 cuando se enviaban las primeras cartas desde el comandante del fuerte de Santa Bárbara, señalando mayores esfuerzos para las tabernas y generar zonas de hospedaje para los peregrinos que iban a visitar la villa en veneración a Santa Bárbara Bendita.
En 1838 el gobierno contrató a un naturalista francés Claude Gay para realizar un viaje científico por el país; su misión estudiar la historia natural de Chile y lo que contribuyera en ese entonces a conocer la industria del país, su comercio y administración. Luego de la segunda fundación de Santa Bárbara la comuna fue visitada por Claude Gay e Ignacio Domeyko ambos científico-botánico que plasmaron en su investigación la biodiversidad de flora y fauna, siendo el inicio del turismo científico en la comuna.
Una de las infraestructuras que se inauguró el año 1899 fue el primer hotel de Santa Bárbara, el hotel Siria que estaba en la intersección de calle rosas con freire era de la familia Ale Cheul, contaba con todos los servicios que se ofrecía en esa época, para los excursionistas que iban a la cordillera a descubrir sus cumbres, observar flora y fauna y contemplar la naturaleza. Describían la belleza escénica del valle de Santa Bárbara asociado a la cuenca histórica del río Biobío. Desde ahí en adelante y tras la llegada del ferrocarril fue una explosión que se desarrolló en el ámbito turístico y que en la década del 30 se fortaleció con la construcción del canal Biobío sur que favoreció la instalación de grandes pensiones, casas de acogida y hostales; desde ahí una de ellas, “Las Totoras”, que fue una de las casas de pensiones más antiguas que existen en la comuna. Dentro del ámbito rural podemos destacar que siempre estuvo el balneario asociado al río Biobío, donde don Esmeregildo Contreras en la calle O’Higgins. También existían playas, actividades nocturnas, incluso se creó un pub en dicho espacio que estaba siempre resguardado por chaperonas, que eran señoras que resguardaban a las señoritas para que se bañaran en el lugar. Esto fue lo que motivó a la primera alcaldesa de la comuna la señora Guillermina León, a hermosear esta ciudad para una visión turística, y fue así como ella propició que se generara una avenida de rosas desde la estación hasta el teatro (actual municipalidad) y hasta la plaza, desde ahí la calle rosas tiene su nombre; Rosas.
También generó instancias de cultura para poder dar distracción a los visitantes que llegaban a la zona a disfrutar del río Biobío y su atributo la pesca, desde ahí también hay una canción de cueca que hasta el día de hoy se recuerda que es “botero del Biobío” del conjunto folclórico Kumei-co que habla respecto a esta actividad tan emblemática.
Después de este proceso de identidad cultural, continuó el desarrollo de los sectores rurales; el sector de Lo Nieve y Quillaileo, ahí es donde nace el primer camping de la comuna, el camping Huequecura en 1965, y esto se atribuye al gran desarrollo del rafting que tuvo Santa Bárbara.
El turismo aventura nació a través del descenso del río Biobío en rafting en la comuna de Santa Bárbara, dado que los primeros exponentes internacionales de esta disciplina llegaron a disfrutar de la braveza de las aguas blancas del río histórico del país, y que en ese entonces Santa Bárbara tenía jurisdicción territorial con todo lo que hoy en día es la comuna de Alto Biobío. Norteamericanos, holandeses, finlandeses, e ingleses fueron los que difundieron esta actividad en Latinoamérica, mencionando el río Biobío como el mejor río para hacer este tipo de descenso dado que su categoría llegaba hasta el grado VI. Esto trajo consigo que Chile se motivara a desarrollar esta visión y se hicieron planes pilotos a nivel nacional. Uno de ellos fue promover la identidad pehuenche, y Santa Bárbara nace con su oficina de turismo en el año 87 cuando nace la reserva nacional Ralco, que fue una gestión de la municipalidad de Santa Bárbara para poder proteger la biodiversidad de la alta cordillera en específico de los bosques de araucarias, desde ahí parte un camino turístico.
Santa Bárbara pasaba por su primera gestora turística, la señora Nadia Campos Ortiz, a quien se atribuyen las primeras conversaciones para el paso internacional Chanchocó y los tratados internacionales para el desarrollo de la actividad turística, así también con el paso de los años se desarrollan nuevas acciones. Después aparece el gran desafío de las centrales hidroeléctricas, las cuales dañan enormemente el desarrollo turístico que estaba recién aflorando en ese entonces en Santa Bárbara; primero con la central Pangue, la cual obstaculizó el desarrollo de actividades de turismo aventura en el río histórico del país, por lo que las empresas de turismo comenzaron a bajar la intensidad de su actividad. Lamentablemente años posteriores aparece la central Ralco, la que finalmente lapida el desarrollo de la actividad turística a través del rafting en las aguas bravas del Biobío, y finalmente las empresas que estaban apostando a este desarrollo de aventura y naturaleza se trasladan hacia la zona sur del país a establecerse en lo que hoy en día es Pucón, el río Fuy, entre otros.
Dentro de la misma trayectoria asume una nueva coordinadora de turismo, la señora Gladys Sepúlveda que da un vuelco dentro de la visión que se estaba desarrollando y genera un turismo más cultural en dedicación al floklore, a la identidad patrimonial, y es la responsable de enfrentarse con la tercera amenaza ya con la comuna dividida entre Santa Bárbara y alto Biobío, y nace la nueva visión turística de este territorio, de la parte baja, y es así como nace también la intervención del proyecto hidroeléctrico Central Angostura, la cual atenta con la fuente turística, el río Huequecura, el balneario de los santabarbarinos que por años había entregado sus aguas puras, cálidas y cristalinas, que en ese entonces fue invadido, inundando a más de 6 cámpines en su ribera. Esto provocó que la comunidad de Santa Bárbara se organizara, y como ya se había observado que había disminuido una gran parte del desarrollo turístico, se piden mitigaciones y compensaciones acorde a la intervención de esta hidroeléctrica; es decir que la comunidad de Santa Bárbara exige que tienen que establecer cámpines de calidad turística, es así como nace el camping la patagua de lo nieve y el camping los notros. También establece un lugar para la venta de productos locales y observación de flora y fauna, y nace el mirador Huequecura. Además, la comunidad exige que el puente colgante que se va a destruir tiene que ser repuesto en el mismo río Huequecura y en las condiciones en la que estaba en su forma original. Lamentablemente gran parte de todo lo que solicitó la comunidad aún se está evaluando dado que no cumple con lo solicitado explícitamente en la RCA.

Turismo sol y rio
Tras ese proceso, Santa Bárbara siguió creciendo turísticamente, afloró la administración del actual alcalde Daniel Salamanca Pérez, el cual desarrolló un plan turístico comunal, en donde la oficina de turismo pasó a ser departamento, en el cual se está trabajando hoy en el posicionamiento de la oferta, en la visualización, en la imagen y en la proyección del rubro, además de rechazar todo proyecto que atente contra la biodiversidad, el patrimonio histórico, natural y cultural de la comuna, (desde el 2014 hasta la fecha se ha manifestado el rechazo rotundo de 5 proyectos hidroeléctricos en el río Huequecura, y en el río Duqueco); generando infraestructura turística para potenciar y fortalecer la oferta, como es el caso del primer centro de recepción y orientación al turista, un museo que hable respecto a la identidad referente al valle, un mercado turístico municipal, una conexión de una ruta internacional, por el paso Pichachén por la ruta histórica, un parque para el desarrollo de la actividad residente para que también pueda disfrutar el turismo, y poner en valor al río histórico del país a través de una costanera en la cual se puede observar la biodiversidad que en él se alberga, entre otras acciones.